Durante el mes de septiembre un agente integrante de la Policía Local de Miranda interpuso una denuncia contra el jefe del cuerpo, acusándole de acoso y prevaricación después de que este último enviara a una patrulla a casa del denunciante para comprobar si las dolencias que habían provocado la baja laboral del funcionario eran reales o no. Ahora, el juzgado que se encarga de la causa ha aceptado la denuncia y ha incluido al denunciado como investigado.
Por ello, el grupo municipal de Izquierda Unida reclama al Ayuntamiento «el cese» del Mayor de la Policía, alegando como motivos principales que la denuncia ha sido admitida a trámite, que el inspector ha sido incluido en la causa como investigado y que este además no cuenta con la plaza pública en propiedad.
Los hechos toman mayor gravedad cuando desde IU aseguran haber conocido a raíz de este caso que «el funcionario que en la actualidad y de forma temporal ostenta el puesto, fue condenado con anterioridad a 19 meses de prisión por un delito de lesiones, lo que le supuso un expediente interno y seis meses de suspensión en el cuerpo de policía».
Además, la utilización de los servicios jurídicos del Consistorio para la defensa del actual Jefe de Policía supone otro motivo de reclamación por parte de Izquierda Unida, ya que la persona denunciante también es un trabajador municipal del Ayuntamiento y no está contando con el mismo apoyo por parte de este.
Una vez que se conoció la denuncia existente, se pidieron explicaciones al concejal de Seguridad, Pablo Gómez, quien aseguró que el Ayuntamiento no había recibido «notificación alguna de ninguna denuncia sobre supuesto acoso laboral», declaraciones que son tildadas como falsas desde IU Miranda, motivo por el cual piden también la comparecencia de Gómez para que esclarezca «hasta la última de estas cuestiones con hechos y documentos contrastados».
