La Dirección General de Tráfico pone en marcha una vez más una nueva campaña especial sobre control de la tasa de alcohol y presencia de drogas que se desarrolla desde el pasado miércoles hasta el martes, 22 de junio. A lo largo de este periodo los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y policías locales de los ayuntamientos que se sumen a la misma prestarán especial atención a estas situaciones.

El subdelegado del Gobierno, Pedro de la Fuente, ha valorado esta campaña señalando “que por desgracia, los datos nos demuestran que siguen siendo necesaria para concienciar a quien conduce de los terribles efectos que provocan el alcohol y las drogas al volante”. Además, ha recordado que “dos de cada tres delitos cometidos contra la seguridad vial en España están relacionados con el alcohol”.

Por su parte, el Jefe Provincial de Tráfico, Raúl Galán, ha hecho un llamamiento a la población para conducir este verano con responsabilidad de cara al incremento de desplazamientos que se producirán con la llegada de las vacaciones.

En los últimos cinco años el alcohol ha estado presente en 101 accidentes en la provincia. Además, han fallecido 16 conductores que dieron positivo en la tasa de alcoholemia.

En el primer semestre de este año se produjeron en la provincia 93 accidentes con víctimas en vías interurbanas, seis de ellas mortales, frente a los 75 del mismo periodo del pasado año con cinco fallecidos.

En la campaña especial de vigilancia celebrada en estas mismas fechas en 2019, se controló a 3.623 vehículos en la provincia registrándose 14 denuncias por conducir superando la tasa de alcohol y 15 por presencia de drogas. En el conjunto de Castilla y León se vigiló a un total de 23.235 vehículos, levantándose 163 denuncias por exceso de alcohol y 131 por drogas.

El alcohol repercute en una mayor mortalidad

El alcohol está presente como factor concurrente o desencadenante en un tercio de los accidentes mortales. Su presencia en la conducción, dependiendo de su tasa, multiplica entre 2 y 15 el riesgo de sufrirlos. La única tasa segura es 0,0%. No solo está relacionado con una mayor accidentalidad, sino que también repercute en una mayor mortalidad, al ser un factor vinculado con un peor pronóstico en las lesiones sufridas.

Conducir después del consumo de sustancias psicoactivas es un hecho frecuente en España, el cannabis (THC), la cocaína, las anfetaminas y las metanfetaminas son las sustancias más frecuentemente halladas. El consumo simultáneo de sustancias, que se ha demostrado como un comportamiento de extremo riesgo vial, es comparativamente frecuente en España.

A lo largo del año 2019, 123.957 conductores estuvieron implicados en accidentes de toda España con víctimas en vías interurbanas y urbanas y se realizó prueba de alcohol al 38% de ellos. En el caso de los conductores fallecidos el porcentaje de conductores analizados fue del 68%, en los heridos hospitalizados fue del 26%, en los heridos no hospitalizados fue del 36% y en los conductores ilesos fue del 42%.

En cuanto a los resultados de las pruebas; el 29% de los conductores fallecidos tuvo resultado positivo en la prueba de alcoholemia, el 15% en el caso de los conductores heridos hospitalizados, el 9% en los conductores heridos no hospitalizados y el 7% en los conductores ilesos.

El porcentaje de conductores con prueba de alcohol positiva en vías urbanas es superior al de las vías interurbanas. En ambos tipos de vía el porcentaje de positivos aumenta conforme lo hace la lesividad del conductor.

Desde la entrada en vigor de la Ley del Permiso por Puntos, alrededor del 12% de los infractores sancionados y del 14% de los puntos detraídos han tenido su causa en el hecho de conducir con una tasa de alcohol superior a la establecida.

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