Cuatro días sin actualización de datos sobre la pandemia de Covid-19 en plena sexta hora por parte de la Administración regional han hecho que, al conocerse la actualización de las cifras, los aumentos sean estratosféricos a nivel regional. Y Miranda de Ebro no ha escapado de esta tendencia, ya que durante el inicio de las fiestas, y ante el temor que suponen los encuentros familiares que se producirán durante estas dos semanas, la ciudad vive uno de los peores momentos en cuanto a contagios de toda la pandemia.
Tal es así que, en estos momentos, Miranda tiene una incidencia acumulada a catorce días que se aproxima a los 1.500 puntos; supera los 40 positivos diarios y tiene ya a más de una decena de pacientes Covid en planta del Santiago Apóstol. Unos datos, a excepción del de ingresados por afecciones derivadas del contagio con el virus SARS-CoV-2, que remiten al peor momento de la primera ola.
Y es que, ni en la tercera, cuarta ni en la quinta ola, las tres sobre las que existe registro de estos datos en el Portal de Datos Abiertos, se habían alcanzado los registros que ofrece hoy la ‘foto fija’ de la pandemia. El 23 de enero de 2021, en plena resaca de las pasadas navidades, el número de positivos registrados en la ciudad en la última semana se elevaba a 303 y la incidencia, a 1.407,58. Fue el momento álgido de aquella tercera oleada, y ni la cuarta ola (que fue la más liviana y se quedé un máximo de 51 positivos semanales y 296,42 puntos de incidencia) ni la quinta (251 infecciones y 1.336,69) lograron superarla. Pues sí lo ha hecho la sexta oleada, la más grave en cuanto a número de contagios tanto en Miranda como en la provincia de Burgos, la Comunidad y España.
Así, en estos momentos la estadística refleja que en Miranda se han contagiado 309 personas de Covid en siete días (a una media de 43 diarias) y la tasa de nuevos positivos por cada 100.000 habitantes en catorce días es de 1.476,51, 864,09 a siete días. El aumento en los últimos días es desorbitado: un 50 por ciento más de positivos (205 antes de las fiestas) y 30 por ciento de alza en la incidencia en solo cuatro días.
En la provincia el dato de la incidencia es de 1.172,65 y en Castilla y León, de 1.733,04, con 16.771 nuevos casos desde el pasado jueves. En la última jornada dos personas han perdido la vida en los hospitales de la región.
Mejor van las cosas, eso sí, en el Santiago Apóstol, donde se hace evidente que la vacunación salva vidas, puesto que en enero, con unas cifras de contagios similares, se disparó hasta los 40, con cinco y seis nuevos ingresos diarios. En la actualidad, el número global de hospitalizados es de once, casi el doble que antes de Nochebuena y Navidad (seis), al haber necesitado ingreso diez mirandeses en estos días. Cinco han recibido el alta y una persona, la tercera de esta sexta ola, ha perdido la vida, elevando la cifra global del complejo asistencial mirandés desde el inicio de la pandemia a 113. De seguir esta tendencia alcista, que los expertos señalan que continuará debido a que quedan, aún, Nochevieja, Año Nuevo y Reyes como fechas destacadas de encuentro familiar y con amigos, la sexta ola batirá todos los récords de la pandemia cuando esta se encamina a los dos años de duración.
