La alcaldesa de Miranda de Ebro, Aitana Hernando, ha salido al paso este miércoles, tras las declaraciones del presidente de la Diputación de Burgos, Borja Suárez, expresando su malestar por el lugar asignado durante la celebración de la misa en honor a la Virgen de Altamira.

En este sentido Hernando ha aclarado que «el protocolo no ha cambiado en relación a años anteriores», y que la intención del Ayuntamiento y de la responsable de protocolo no era «orillar» a los representantes de esta institución provincial, tal y como declaraba ayer Suárez tras la misa.

“No se ha tratado de orillar a nadie. Se intenta hacer de la mejor manera, procurando hacer las cosas bien y que todo el mundo esté a gusto», ha insistido Hernando.

«Es más, llamé a Borja Suárez justo después, cuando me han dicho que estaba molesto, para pedirle disculpas si se ha sentido mal por estar en segunda fila y explicarle que no ha habido mala intención en absoluto. No hay que buscar intenciones ocultas donde no las hay», zanja la alcaldesa.

Al mismo tiempo ha aprovechado para mostrar su «agradecimiento» por acudir al día grande de las fiestas patrolales, «tanto a Borja Suárez como a todos los cargos públicos que nos visitaron en el Día de la Patrona”, sostiene la Hernando.

No obstante, ha adelantado que si hubiera que modificar la ubicación de alguna de las personalidades asistentes, se estudiará, «intentando hacer las cosas de la mejor manera posible».

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí