La Junta de Castilla y León ha decidido mantener las actuales restricciones en toda la Comunidad, al menos una semana más, hasta que las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) tengan una ocupación de pacientes inferior al 35%. Así lo ha avanzado este lunes el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea en rueda prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno extraordinario, en la que ha estado acompañado de la consejera de Sanidad, Verónica Casado. De esta forma han anunciado que cualquier medida de desescalada está condicionada a que la ocupación en las UCI, el próximo lunes, esté por debajo de este porcentaje.
Igea ha avanzado que la situación volverá a evaluarse el próximo lunes y será cuando previsiblemente se avance en la desescalada por provincias, relajando las medidas adicionales de nivel 4, que afectan al interior de los establecimientos de hostelería, gimnasios y centros comerciales. Sin embargo esta flexibilización estará condicionada a una evolución epidemiológica favorable con bajos índices de ocupación hospitalaria, para «tener suficiente capacidad de respuesta».
En este sentido Francisco Igea ha recalcando que no se saltarán los pasos del criterio «del semáforo de niveles», por lo que se cumplirán todos los estados. De esta forma ha insistido en que se pasará por cada uno de ellos y siempre que la tendencia sea descendente, evaluando los datos cada dos semanas.
Por otro lado el vicepresidente del Gobierno autonómico no ha ocultado que la Semana Santa es difícil que se desarrolle como muchos desean y en todo caso habrá reuniones del Consejo Interterritorial previas en el se prevé tratar el confinamiento y las medidas para próximas fechas. Sin embargo ha adelantado que la apuesta de la Junta de Castilla y León es mantener por el cierre perimetral en la Comunidad y la prudencia como medidas para frenar el crecimiento de los contagios.
Al mismo tiempo ha puesto de manifiesto el peligro de la cepa británica que se afianza en la Comunidad, algo que está provocando «un valle en los descensos de contagios y la prorroga de los tiempos de hospitalización».
Por otro lado Igea ha apuntado que se van a cambiar las medidas que afectan a las sanciones, llegándose a cerrar los establecimientos que no cumplan las medidas, de tal manera que beneficiaría a los que son cumplidores.
En cuanto al proceso de vacunación, Verónica Casado ha señalado que continua con su evolución y se mantienen reuniones con el Ministerio de Sanidad para incrementar en todo lo posible este proceso. En este sentido ha asegurado que la escasez de la vacuna Pfizer no es un problema, y en cualquier caso esta garantizada, al tiempo que ha advertido que si no fuera así, se empleará la de vacuna de la compañía Moderna.
