Tercera victoria consecutiva, nuevo gol determinante de Raúl García de Haro y barrera de los 50 puntos superada. El Mirandés sigue al alza, gana al Andorra a domicilio y afronta la recta finalísima de temporada cargado de moral. Con el reto de alcanzar la mejor clasificación histórica, ya sin apuros, y con la sensación de que la temporada se le ha quedado corta.
Gran victoria de los rojillos en su primera vez en el Estadio Nacional de Andorra en un partido que tuvo mucho dinamismo y alternativas para ambos conjuntos. Mejor los rojillos en los primeros 25 minutos de partido con una presión alta que asfixió la salida de balón del cuadro andorrano para buscar la manera de batir a Raúl Lizoain.
Estuvo muy activo el perfil izquierdo rojillo, con José Salinas y Óscar Pinchi llegando hasta posiciones muy adelantadas, generando situaciones de peligro en esos minutos iniciales. De hecho fue el lateral quien dispuso de una de las ocasiones más claras al recibir un buen balón de Roberto López, que acababa bloqueando Lizoain echándose encima del propio Salinas.
Minutos después Beñat Prados desde la frontal, en un disparo que se marchaba fuera poco, y Raúl García de Haro en acción individual completaron las oportunidades más claras de los rojillos en ese primer tramo del encuentro. En lo restante fue el FC Andorra quien tomaba el mando inclinando esta vez la balanza hacia campo rojillo.
Herrero, otra vez decisivo
Bakis en primer aviso y Alfonso Herrero después, interviniendo a un potente disparo desde la frontal de Molina, marcaban el cambio de guion en ese tramo final del primer acto, que aún se despediría con un remate fallado de Álex Pastor en boca de gol cabeceando fuera un balón desde la izquierda. El partido estaba eléctrico y muy abierto.
Y en la reanudación todo siguió igual. Volvieron los mismos protagonistas con la intención de disputarse de nuevo un balón que ambos conjuntos querían a toda costa. Sin embargo el peligro no llegaría fruto de la elaboración, sino de un fútbol más práctico. Así encontraron los jabatos su primera gran ocasión a los 60 minutos de juego. Roberto López recibía de Pinchi y se giraba perfecto en área para sacar un remate cruzado que desviaba Lizoain a córner.
La réplica 13 minutos después en un balón directo a la espalda de la zaga rojilla que aprovechaba Germán para encañonar. Alfonso Herrero en una gran intervención desbarataba el gol para los locales, quienes minutos después tenían nuevamente la opción de adelantarse en el marcador con una volea de Pampín que se estrellaba contra el travesaño. Todo podía pasar en el Estadio Nacional de Andorra.
El gol
Sufrieron los rojillos en esos minutos, y la resistencia tuvo premio al contraataque. Intervenían dos jugadores recién salidos al terreno de juego. Conducía la jugada Gelabert que abría a la izquierda buscando la carrera de Llabrés. El extremo rojillo se colaba en el área y era derribado por el exrojillo Lizoain. Penalti.
Era el minuto 84 de partido y desde los 11 metros preparaba Raúl García de Haro su balón para hacerse cargo de una pena máxima que podía decidir el encuentro y permitía al Mirandés gana al Andorra. El delantero no fallaría ante Lizoain y convertía su 18º gol en LaLiga SmartBank superando el registro de Urko Vera.
Gol, victoria y tres puntos que saben a casi definitivos en el objetivo de la permanencia. Ya son 51 en la tabla tras encadenar la tercera victoria consecutiva. Y ahora a por más.
