La Liga de Fútbol Profesional ha dado esta mañana a conocer los límites salariales de Primera y Segunda División, categoría en la que el Club Deportivo Mirandés es el tercer club más humilde. Y lo es pese a superar en poco más de 400.000 euros el tope de gasto en plantilla que se le impuso en el ejercicio 2021/22, lo que supone que su inversión se sitúe por encima de los 6 millones de euros por primera vez.
Concretamente son 6,174 millones los que la patronal futbolística concede al cuadro de Anduva frente a los 5.701 del anterior ejercicio. Un incremento notable porcentualmente (8,3 por ciento) pero que es inferior al de ‘rivales directos’ por la modestia económica: el pasado curso había hasta cuatro equipos con un límite inferior y esta vez, solo dos.
Son el Lugo (4,277) y el Albacete (5,749) los dos únicos equipos con menos posibles económicos. Los lucenses ya estaban en la misma situación hace doce meses, mientras que los manchegos son un recién ascendido. Amorebieta y Girona que el pasado año estaban por debajo ya no se encuentran en la categoría (por descender y ascender, respectivamente) y el Burgos ha registrado un incremento del tope superior (de 5,502 a 6,313) que deja a los rojillos en el furgón de cola de la categoría.
Cifras ligeramente superiores a los de los rojillos presentan, además del mencionado Burgos, la Ponferradina (6,181), el Cartagena (6,414) y el Andorra (6,529). No aparece en el listado el Villarreal B por tratarse de un equipo filial.
Entre los más poderosos económicamente destaca sobremanera el recién descendido desde Primera Granada, que dispone de un límite salarial de 29,126 millones de euros, con una ventaja de 10 millones sobre el Leganés, segundo en la tabla (19,522). El podio lo completa el Eibar con 13,208 y tras ellos se sitúan el Levante (11.948), Las Palmas (11.520) y Málaga (11.500) por encima de los once millones de gasto en salarios para la plantilla.
