Más de un centenar de personas se han concentrado la mañana de este miércoles en las puertas de la Residencia Mixta «Francisco Hurtado de Mendoza y María Mardones» bajo el lema ‘Personal insuficiente = Calidad deficiente’.
La convocatoria, iniciada por Comisiones Obreras, ha contado con la adhesión de todos los sindicatos del Comité de Sanidad y Familia, es decir, UGT, CGT, SAE, CSIF y SATSE.
«La residencia está muy tensionada». Así de clara se ha mostrado María Ruiz, secretaria general de CCOO en Miranda, quien ha señalado que «la petición que piden los trabajadores es que no sean unas migajas como nos acaban de dar».
Y es que, tal y como ha explicado Ruiz, «la residencia de Miranda está en total ocupación, está en 185 de las 191 plazas».
Una situación que «está mantenida en el tiempo en todos los centros, afecta a varios colectivos y principalmente es la base del problema, la falta de personal» , explicaba la vicepresidenta del Comité de Empresa.
Ruiz ha puesto el foco en el personal de servicio, puesto que según afirma, «ahora mismo están pasando a un personal de servicio del turno de la tarde al turno de mañana porque no pueden cubrir el servicio».
«Entendemos que tienen que tomar medidas urgentes con esta residencia porque ya no va a haber más transformación de ella. Está totalmente transformada en asistida y lo que necesitamos es que den una RPT exacta para las necesidades que tiene la residencia en sí», afirmaba la secretaria.
Marian Rocandio, trabajadora, calificaba el sentir del personal de servicio como «saturados» y señalaba directamente al Director, a Begoña Franco, encargada, y a la Viceconsejera, puesto que «estamos trabajando bajo una presión tremenda».
«La lavandería es un colapso. Llega un momento en el que no puedes dar salida a la cantidad de ropa que hay y a la cantidad de trabajo que tenemos», afirmaba Rocandio.
Asimismo, «no se cubren las bajas hasta pasado mucho tiempo, no podemos seguir en esta línea. Los residentes que entran cada vez son más dependientes, andamos todas con un horario muy fijo», lamenta.
Además, ha explicado que «muchas compañeras están de baja por las situaciones de trabajo y la presión» .
Esta situación ha llevado a «algún pequeño enfado entre colectivos» , ya que «en el turno de tarde, al quitar un efectivo, está sucediendo una cosa. Ellas, con un efectivo menos, a las 22h tiene que salir, pero casi se solapa la hora de ellas de limpiar los comedores, con el momento de que las auxiliares están dando las cenas».
Ruiz ha explicado que «la residencia está bajo mínimos» y ahora mismo, se baraja la posibilidad de «mover una manifestación» en el mes de febrero.
No obstante, se hablaría antes con los tejidos asociativos de la ciudad y los partidos políticos.
De momentos, las concentraciones seguirán en las puertas de la residencia el próximo 18 de diciembre, así como los días 8, 15, 22 y 29 de enero del próximo año.