El jurado popular ha declarado culpables tanto al autor como al colaborador necesario en el caso del asesinato de F.J.F.D. Un suceso que se produjo hace poco más de un año, en marzo de 2022, a primera hora de la mañana en la calle Vitoria, en el barrio de Gamonal. Los miembros del jurado han entendido, a tenor de las pruebas presentadas, que H.A.H.P., quien confesó ser el autor del crimen, no se encontraba bajo los efectos del alcohol o drogas cuando apuñaló a la víctima. Y añade el veredicto que la víctima no tuvo posibilidad de defenderse, ya que en contra de lo esgrimido por la defensa, fue atacado por sorpresa por la espalda.
Las pruebas demuestran, además, que el agresor se dirigió al fallecido con un cuchillo previamente tomado de su hogar, lo enfrentó y finalmente lo apuñaló por la espalda. Lo hizo sin prestar atención a las consecuencias ni llamar a los servicios de emergencia. Un razonamiento que contrasta con lo argumentado por la defensa de H.A.H.P., que sostenía que el agresor actuó movido por un «temor invencible».
El jurado popular también considera culpable al segundo acusado, Y.J.L. En este caso lo hace por su papel como colaborador necesario en la ejecución del crimen. En el trascurso del juicio se han presentado pruebas y testimonios que han demostrado que este segundo implicado no solo no intentó impedir la agresión sino que conocía las intenciones del autor confeso y lo alentó.
Juicio de cinco días
Tras cinco días de testimonios de los acusados, sus defensas, testigos, policías y médicos forenses en el Palacio de Justicia, el juicio por el asesinato de F.J.F.D. ha concluido. Queda ahora queda a la espera de la sentencia. Los hechos tuvieron lugar en la madrugada del 26 de marzo de 2022 tras un enfrentamiento entre la víctima y los acusados en los baños de un establecimiento de hostelería en la calle Francisco Grandmontagne. Tras el encontronazo, la víctima se retiró del lugar acompañada de un amigo. H.A.H.P., por su parte, expresó su deseo de matar a F.J.F.D., marchó a su domicilio en busca de un cuchillo y regresó después para acuchillarlo. Lo hizo a la altura del número 168 de la calle Vitoria.