Un merecido y emotivo homenaje. Miranda recuerda a uno de sus vecinos más ilustres, Ángel Acha, a quien a título póstumo se ha entregado esta tarde el León de Oro. Se ha hecho en un acto sencillo en el que sus hermanas han rememorado la pasión de Acha por el cine.

Como destaca el acuerdo de Junta de Gobierno leído por la alcaldesa, Aitana Hernando, “gracias a él Miranda sigue disfrutando del cine Novedades”. Miembros de todos los grupos municipales han querido rendir tributo a una persona que murió joven pero que dejó una huella imborrable. “Él y su familia están íntimamente ligados a la historia del cine y Miranda”, ha apuntado la alcaldesa. Fue su padre, Emilio, quien abrió el Novedades en los tiempos dorados, cuando llegaron a convivir ocho salas. Y Ángel puso todo su empeño, ilusión y talento en reabrirlo años después, cuando Miranda se quedó huérfano.

Por ello, el reconocimiento de la ciudad es notable. Como recordaron las hermanas del homenajeado, “era una persona sencilla” a la que le gustaba “proyectar cine y pescar”. Que encontró en Miranda su sitio y donde dejó amigos. Rememoraron las Acha Martínez cuando, al apostar Íñigo por reabrir la sala, se pasaron “un mes entero” limpiando la sala de arriba a bajo, sacando “ni sé cuántas cajetillas de tabaco” y una cantidad inabordable de suciedad acumulada por los años de cierre.

“Era un gran conocedor del cine como espectáculo y como industria”, ha destacado Hernando. Y tenía un profundo “sentido de comunidad”, ha añadido que ha permitido a Miranda salvarse del apagón cinéfilo que hace más de una década parecía irremediable. “No dejó de pelear por mantenerlo abierto”.

Motivos más que de sobra para recibir el León de Oro, el máximo reconocimiento de una Miranda que recuerda a uno de sus vecinos más ilustres y luchadores por la ciudad.

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