Efectivos de la Policía Local y del Cuerpo de Bomberos de Miranda de Ebro continúan las labores de investigación que permitan discernir cuál fue la causa que provocó el incendio en el edificio situado junto al número 23 de la calle San Agustín y que ha debilitado la estructura del mismo, haciendo que este se venga abajo en su parte interior, afectando a inmuebles colindantes.
Los equipos de emergencias que se han trasladado al lugar tras el inicio de las llamas y el consiguiente derrumbe apuntaban a que el edificio en cuestión se encontraba totalmente deshabitado, por lo que no habría que lamentar pérdidas humanas o heridos. Esto levanta más dudas alrededor de las posibles causas del fuego.
Sin embargo, la propiedad del inmueble derrumbado apunta a que este sí estaba habitado por okupas, quienes podrían haber provocado inintencionadamente el incendio por su estancia en el edificio.
Aún se desconoce si esta hipótesis es cierta o si realmente había alguien en el edificio en el momento en el que se iniciaron las llamas, pero la investigación sigue su curso en busca de esclarecer este aparatoso incidente.
Según fuentes de la investigación las llamas se originaron sobre las 03:00 horas y han dañado la estructura del inmueble lo que ha motivado el colapso de la parte trasera del edificio a primera hora de esta mañana.
